Croqueta: “Porción de masa, generalmente redonda u ovalada, hecha con un picadillo de jamón, carne, pescado, huevo u otros ingredientes, que, ligado con besamel, se reboza en huevo y pan rallado y se fríe en aceite abundante”. Así nos define el DRAE la palabra croqueta, pero yo cuando escucho semejante término lo único que percibo es que se me hace la boca agua, señores, tal cual. El pasado 16 de enero se celebró el Día Internacional de la Croqueta y, como en La Línea de Fuego somos croqueteros acérrimos, no hemos querido dejar pasar esta maravillosa oportunidad para hacerle un pequeño homenaje a este plato al que pocos se resisten. ¿Sabías que el origen de las croquetas está ligado al cocinero francés Antonin Carême quien ideó en 1817 una receta bautizada como croquettes à la royale? Sin embargo, las croquetas son en la actualidad un clásico en países como Italia, Países Bajos y, qué duda cabe, en España. ¿Todavía no tienes claro dónde comer las mejores croquetas de Madrid? Coge papel y lápiz y apunta, hoy estás de suerte.
- La gastrocroquetería de Chema (Calle del Barco, 7)
Si hay un restaurante en el que coinciden las diferentes rutas de croquetas que circulan por la red es precisamente La gastrocroquetería de Chema. Y no es para menos si tenemos en cuenta que este negocio del cocinero Chema Soler es una auténtica oda a la croqueta. Aquí encontrarás propuestas tan vanguardistas como las croquetas de sobrasada con chocolate, de sepia en su tinta gratinada, de puerro con queso de cabra y pimientos e incluso de galleta Oreo con nata.
- Lambuzo (Calle Ponzano, 8)
La verdad es que Lambuzo está en casi todas nuestras listas pero en esta selección de croquetas no podía faltar. En la carta de este local especializado en comida gaditana destacan las croquetas de gambas al ajillo, de tortillita de camarones, de mejillones en escabeche y de algún que otro sabor más que dependerá de la temporada en la que nos encontremos. Las he probado todas y elegir una favorita es una tarea absolutamente difícil, pero lo cierto es que las de mejillones en escabeche son quizá las más originales.
- Bar Casa Paco (Calle Altamirano, 36)
Tal vez conozcas este bar tan castizo por sus famosísimos pinchos de tortilla, con variedades como el pincho de tortilla de cuatro quesos, el de solomillo con cebolla caramelizada y queso de cabra o el de berenjena. Pero en este negocio no solo son célebres sus tortillas sino también sus croquetas exquisitas, como las de boletus, salmón con roquefort o berenjena con foie.
- Poncelet Cheese Bar (Calle José Abascal, 61)
En La Línea de Fuego nos pierden las croquetas, pero es que además nos encanta el queso, razón por la cual Poncelet Cheese Bar forma parte de esta lista. ¿Te imaginas unas croquetas de queso de cabra Madurado de Madrid, de queso de oveja Arribes o de queso azul D’ Ambert? Pues deja de imaginártelas y pruébalas, en Poncelet las preparan.
- El trajín (Calle Ponzano, 1)
Es posible que si pasas por delante de El trajín pienses que es un bar de copas y que no es el lugar adecuado para cenar pero si lo que estás buscando es una cena de picoteo a un precio económico, El trajín es tu sitio. Las croquetas de este local están deliciosas, doy fe, y por menos de 7 euros te sirven seis croquetas, que no está nada mal si tenemos en cuenta que estamos en plena calle Ponzano. Las tienen de bacalao, de chuletón y de carrillera de ternera (estas últimas te enamorarán).
- Zielou (Estación de Chamartín)
Seguro que habrás oído hablar de Zielou, el nuevo restaurante ubicado en la estación de Chamartín que en sus pocos meses de vida se ha situado en el top gastronómico de la capital. Las creaciones de los hermanos Maestro te dejarán sin palabras, y sus croquetas te harán #volarsinalas. En Zielou podrás degustarlas de cecina con leche fresca y sus crujientes… ¡No te las puedes perder!
- Petisqueira II (Calle Churruca, 6)
Petisqueira II, “la petis” para los parroquianos habituales, es otro de esos bares de toda la vida que tienes que conocer sí o sí. Solo por las tapas que sirven con la bebida merece la pena ir, y si a eso le añades que eres croquetero de corazón entonces no tienes ninguna excusa para no ir. Las croquetas son caseras, casi, casi como las de tu abuela, y la ración es enorme. Vienen ocho, cuatro de jamón y cuatro de queso. Veredicto: ¡De sobresaliente!
- Punto Básico (Calle Marqués de Urquijo, 23)
Hay muchos motivos para dejarse caer por Punto Básico, desde su decoración delicada hasta su extensa carta que cuenta con una variedad amplísima de entrantes, carnes, pescados, hamburguesas y arroces. Sus croquetas no tienen desperdicio, y apuestan por las de salteado de hongos y trufa y por las de rabo de toro. Recomendables cien por cien.
- Hevia (Calle Serrano, 118)
Este restaurante de la calle Serrano es uno de los emblemas gastronómicos de la capital, y todo foodie empedernido que se precie tiene que cenar en Hevia alguna vez. Cuando estuve comiendo me pareció que estaba todo delicioso, pero recuerdo especialmente dos platos: la tosta de ensaladilla de ahumados (espectacular) y las croquetas de jamón. Que sí, que serán las típicas, pero te cautivarán, de verdad.
- Casa Labra (Calle Tetuán, 12)
Otro de los incondicionales en las rutas de croquetas es Casa Labra, y en La Línea de Fuego hemos querido mantener esta taberna que lleva en Madrid desde 1860, que se dice pronto. Está junto al Corte Inglés de Sol y ellos mismos afirman que su especialidad son las croquetas de bacalao, y nosotros nos los creemos a pies juntillas y tenemos pendiente catarlas.