Llevaba demasiado tiempo sin dejarme caer por aquí, e incluso me sorprendo de estar escribiendo estas líneas. No sé si estaba esperando a que llegara a mis manos el tema perfecto, o quizá el verdadero responsable sea mi taller de escritura, que me ha reactivado las ganas de escribir por puro placer. El caso es que quiero recomendarte un plan del que te vas a enamorar desde ahora mismo: cenas privadas en Madrid. Si eres una persona sociable, estás harta de ir siempre a los mismos sitios y tu mente está preparada para vivir nuevas experiencias, ¡toma nota!

FELICIANA Private Dining

Sí, me has descubierto: esta ha sido mi principal inspiración para escribir este post. No soy tan mala como para destriparle la sorpresa a Mariano, el anfitrión y artífice de esta gran propuesta —tampoco tendría ningún sentido—pero necesito explicarte de qué va esto. FELICIANA es un plan que aúna comida mexicana, cultura y felicidad en torno a una mesa de un máximo de ocho comensales. ¿Que qué pasa si no consigues juntar a ocho amigas? Bien, en este punto es cuando nace la diversión: Mariano completa la mesa y tú conoces gente. No suena mal, ¿no?

Inspirado en la “felicidad de compartir” y en los valores de la madre de Mariano (Feliciana), nace este concepto de sharing table. El spot, que es el piso de Mariano, se revela cuando has formalizado la reserva, pero te doy una pista: La Latina.

No exagero si digo que su casa es como una galería de arte: mires donde mires, hay un detalle esperando ser descubierto. La propuesta gastronómica sobrepasó nuestras expectativas: muy abundante, variada y sencillamente deliciosa. Mariano nos abrió las puertas de su casa y nos trató con una hospitalidad difícil de encontrar a día de hoy. El resto de sorpresas te invito a que las descubras tú misma. En cuanto al precio, en mi opinión más que ajustado si valoramos la relación entre la calidad y la cantidad: 42 euros.

Timeleft

Supongo que prácticamente la mayoría de la gente sabe qué es Timeleft, pero lo dejo por aquí por si algún despistadillo/a aún no tiene controlada esta app. Estoy segura de que las que hemos pasado los 30 compartimos la misma opinión: no es tan fácil conocer gente y el mundo de las apps y de las pantallas da una pereza que aburre a las ovejas. Lo diferenciador de esta aplicación es que irrumpe para desvirtualizar estas conexiones desde el minuto cero. Debes responder a una batería de preguntas y, en función de tus respuestas, el algoritmo hace su magia y te citan con un grupo de personas afines a ti.

Cuéntame en comentarios más opciones como estas. Te leo.