“La vida es muy corta para andar perdiendo el tiempo”, decía nuestro adorado Paul Auster en su novela Invisible, y no puedo estar más de acuerdo con él. Cuántas veces nos enfadamos con los que más queremos, cuánto orgullo derrochamos creyendo que somos eternos y la vida no es más que un instante, y hay que amar, amar mucho. Septiembre es el mes de los reencuentros, de los comienzos, de la ilusión y del amor, y en La Línea de Fuego somos conscientes de ello. Hoy nos sentimos viajeros y enamorados, así que hemos elaborado una lista con 10 ciudades españolas perfectas para una escapada romántica… ¡Apunta!
- Granada
La magia de Granada es incomparable, por eso ocupa el primer lugar en esta selección. Mi amiga Nieves, de padre granadino de cuna, nos recomienda un paseo romántico por el barrio del Albayzin, los alrededores de la Alhambra y visitar el mirador de San Nicolás, donde las vistas os dejarán sin palabras. También tenéis una cita con la Catedral, el barrio del Sacromonte, el Paseo de los Tristes y la calle Elvira. Para una cenita especial, nos sugiere Sibarius o Romanilla 530 y después un helado en Los Italianos. Si te apetece descubrir más secretos de Granada, te invito a leer este artículo de nuestra redactora Alaia Rotaeche: Lugares (de Granada) que no quiero compartir con nadie.
- Sevilla
Es prácticamente impensable hablar de ciudades románticas sin mencionar Sevilla, sería un pecado. Un plan estupendo es pasear por el Parque de María Luisa (podéis hacerlo a pie o coger un coche de caballos) y ver la Plaza de España, deambular por Triana y hacer fotos a la Catedral, a la Giralda y a la Torre del Oro. A la hora del aperitivo, una de las mejores opciones es ir al barrio de Santa Cruz y tomarse una caña y una tapa en Las columnas (calle de Rodrigo Caro, 1, esquina con Mateos Gago). Una de las plazas con más bullicio y con mucha gente joven es la Plaza del Salvador. Por otra parte, Sevilla es una ciudad cofrade, y destacan la Basílica de El Gran Poder, la de la Esperanza de Triana y la de María Santísima de la Esperanza Macarena. Vuestra cena romántica: en la Terraza del hotel EME (calle Alemanes, 27), con vistas a la Giralda.
- Toledo
Esta ciudad medieval es absolutamente romántica y quien haya estado seguro que estará de acuerdo conmigo. Si no conoces todavía Toledo seguro que ya habrás oído que tienes que visitar lugares como la Catedral, la judería, la Mezquita del Cristo de la Luz, la Sinagoga de Santa María La Blanca, el Alcázar, la Iglesia de los Jesuitas o el Museo de El Greco. Toledo es una ciudad para pateársela a pie y tiene miradores asombrosos como el mirador del Valle, que ofrece la panorámica más popular; el de la terraza del restaurante Adolfo; el del Cigarral de las Mercedes; y el del Parador. Algunos de sus rincones especiales son el cobertizo de Santo Domingo El Real (por la noche mejor pasar acompañado) o la calle de Santa Isabel, desde donde se puede apreciar a lo lejos la torre de la Catedral. Para cenar os recomiendo la Cervecería El Trébol.
- San Sebastián
En La Línea de Fuego nos fiamos de la gente local y en esta ocasión le hemos preguntado a mi amiga María para hablar de San Sebastián, cuyo padre es vasco. Para empezar a disfrutar de esta bella ciudad, María recomienda un paseo romántico por las playas de Ondarreta, la Concha (es famosa su barandilla blanca) y Zurriola. Si lo que estáis buscando son unas vistas de infarto lo mejor es que subáis al monte Igueldo, donde tendréis una fantástica panorámica de San Sebastián. En cuanto a monumentos y edificios significativos no os podéis perder la Catedral del Buen Pastor, el ayuntamiento o el Hotel María Cristina diseñado por Charles Mewes, quien ideó el Ritz de Madrid. Para ir de pintxos podéis callejear por la parte vieja y para una cena bonita apostamos por Juanito Kojua (calle Puerto, 14).
- Barcelona
Barcelona es una ciudad viva, cosmopolita y con un espíritu moderno que puede ser una muy buena opción para una escapada romántica. El Parque de la Ciudadela, inspirado en los Jardines de Luxemburgo parisinos, es uno de los lugares con más encanto de Barcelona donde os podréis sacar fotos impresionantes. Os tenéis que perder por las calles del Barrio Gótico y recorrer la Rambla con una parada estratégica en el Mercado de la Boquería. La Basílica de Santa María del Mar, que inspiró la novela La catedral del Mar, sin duda merece una visita. La Barceloneta, el Paseo de Gracia, la Sagrada Familia, el Parque Güell, la Casa Batlló o la Pedrera son algunos de los lugares imperdibles. Las mejores vistas las encontraréis en los Búnkeres del Carmel, donde tendréis Barcelona a vuestros pies. Para una cena romántica recomendamos Gut (calle Perill, 13), con una cocina que fusiona la comida mediterránea y la asiática y con una decoración delicada que os enamorará.
- Oviedo
Esta recomendación, como no podía ser de otra manera, viene de la mano de nuestra redactora asturiana, Sara Pérez. Como nos dice Sara, Oviedo es la ciudad de La Regenta, la de Woody Allen, la ciudad más limpia de Europa y, para La Línea de Fuego, una ciudad que deja sin aliento. La plaza y el mercado del Fontán son dos de los lugares con más vida de la ciudad, la calle Uría es la calle comercial por excelencia y la calle Gascona es ideal para ir de sidras. Las mejores vistas de Oviedo las encontraréis en lo alto del Monte Naranco, donde está el monumento del Cristo Redentor. Además de la Catedral de San Salvador, son importantes las construcciones de San Miguel de Lillo, Santa María del Naranco y el Teatro Campoamor, sede de los Premios Príncipe de Asturias. Un paseo relajado: por el Parque de San Francisco, donde siempre se para el tiempo. Para cenar: Secreto a voces (calle Manuel Pedregal, 8)
- Santander
Santander es una de las ciudades más señoriales y elegantes de España, y como nos gusta tanto hemos querido que estuviera presente en esta lista. Uno de los lugares que no pueden faltar en vuestro viaje es la Península de la Magdalena, famosa por su palacio, su zoo y su playa. Podéis ver la Catedral de la Asunción, la Plaza Porticada, el casino y el Mercado de la Esperanza, entre otras muchas cosas. Por supuesto, os tenéis que acercar a los Jardines de Pereda y explorar toda la zona de El Sardinero. Para tapear, Joaquina Carbonell sugiere la calle Hernán Cortés y restaurantes como Zacarías o La Posada del Mar.
- Zaragoza
Zaragoza es otra bella ciudad española que es digna de una escapada romántica. Un plan divertido puede ser recorrerse la ciudad en bici si hace buen tiempo, hay abonos de 72 horas que seguro que os compensarán. Qué duda cabe que la Basílica de Nuestra Señora del Pilar es una visita obligada, y ya que estáis ahí subid a su mirador, en la Torre de San Francisco de Borja. Además, tenéis que acercaros a la zona de la Expo, donde veréis la Torre del Agua y el Pabellón Puente, su puente más impresionante. Tampoco os podéis perder el Castillo-Palacio de la Aljafería, el monumento árabe por excelencia; la Seo, la otra catedral de Zaragoza; y la Plaza de los Sitios. Para cenar: o bien tapeáis por el casco histórico y El Tubo u os atrevéis con El Chalet (calle Santa Teresa de Jesús, 25).
- Santiago de Compostela
Santiago de Compostela es la ciudad de los peregrinos, pero por qué no ser también la de los enamorados. La ciudad es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, y es que cuenta con monumentos de una belleza impactante. Algunos de los que debéis visitar son su catedral, el Hostal de los Reyes Católicos y el Monasterio de San Martiño Pinario. Varias plazas emblemáticas que tienen que estar en vuestra agenda son las del Obradoiro, Platerías, Quintana y Abastos. Si os apetece ir a parques chulos podéis optar por el Parque de la Alameda, el de San Domingos de Bonaval y el paseo fluvial del río Sarela, que se adentra en el bosque. ¿Estáis pensando en una cenita romántica? Entonces, anota: A Curtidoría (calle Da Conga, 2-3).
- Madrid
Para los que no seáis de Madrid, Madrid es una ciudad increíble para un fin de semana romántico, así que teníamos que incluirla en la lista sí o sí. Proponemos ver la puesta de sol en los miradores del Templo de Debod, un paseo por las calles del Madrid de los Austrias y por la Plaza de Oriente, uñas cañas por la Latina y un beso interminable en la azotea del Círculo de Bellas Artes. Los más hipsters no podéis dejar de ir a merendar por Malasaña en alguna de sus cafeterías molonas y a tapear por Lavapiés. Para cenar, proponemos que reservéis en algún restaurante nuevo como Habanera o El Invernadero de Salvador Bachiller, y después os podéis tomar una copa en Macera, en la calle San Mateo.